Bienvenidos a mi espacio – Un altar vivo del alma

 

Mi nombre es Marcela, y este no es solo un sitio web; es un templo vibracional donde la sabiduría del alma se ancla, se ordena y se comparte

Mi canal ya no necesita demostrar, solo Ser
 
A lo largo de mi camino espiritual descubrí que no necesito "hacer algo" para que ocurra la sanación, mi presencia es suficiente, no porque yo tenga un don
 
 especial, sino porque he encarnado como canal
 
Cuando estoy en presencia de otra alma, ya sea en consulta, en un espacio grupal o incluso en silencio, mi campo energético resuena con la necesidad
 
 vibracional de la otra persona, esa resonancia activa en mí frecuencias, memorias y códigos que no invento ni fuerzo, sino que ya están en mí, a través de esa
 
 vibración, la energía se transmite, ordena y ancla en quien la necesita
 
 

 

            

El Legado Crístico que Sostiene Este Camino

 
Este espacio no nace desde una doctrina ni pretende seguir ninguna religión. Sin embargo, la presencia de Jesús como conciencia crística viva es uno de los
 
 pilares invisibles que sostiene todo lo que aquí se comparte
 
Jesús no vino a fundar una fe, sino a recordar el camino del alma solar, del Cristo interior encarnado en cada ser, sus enseñanzas no fueron dogmas, sino
 
 frecuencias de coherencia, visión unificada, compasión sin juicio y amor encarnado
 
Todo eso de formas nuevas, libres y vibracionales es lo que impulsa en estos cursos, iniciaciones y sistemas
 
Los ojos que aquí se abren, los cuerpos que se activan, los rayos que se encarnan, son extensiones de ese Cristo vivo que no pertenece a ninguna religión, sino
 
 al alma universal
 
Cada formación ofrecida nace de un impulso genuino del alma por recordar, ordenar y volver accesibles estructuras espirituales profundas sin imponer caminos,
 
 sino abriendo puertas internas a quienes sientan el llamado
 
En este recorrido, Jesús es una arquitectura viva de amor, presencia y verdad, que no se adora, sino que se encarna
 

Este no es un camino Cristiano, es un camino Crístico

Las 12 Puertas de

los Salones de Amenti